Todas saben que es muy diferente tener 30, que 40 o 50 años, y cada momento de la vida de una mujer requiere de un cuidado especial.

Sucede que la piel sufre de transformaciones específicas en cada etapa: hablando de la menopausia en particular, se produce una pérdida de elasticidad, tonicidad, volumen y confort de la piel.

Te contamos TODO lo que tienes que saber para que cuidar la piel después de la menopausia sea una tarea sencilla

¿Qué le pasa a la piel en la menopausia?

Antes de aprender a cuidar la piel es necesario saber qué le sucede. El cese de la menstruación se debe a la disminución de la producción de las hormonas (estrógeno y progesterona) de los ovarios e implica un cambio hormonal muy fuerte para las mujeres.

Los bajos niveles de estas hormonas producen un cambio en el balance corporal generando diferentes efectos en tu cuerpo. Entre los síntomas de esta etapa están los famosos «calores», esa sensación de calor abrupto, la sudoración al dormir, el aumento de peso y… la aceleración en el envejecimiento de la piel. Este es el punto clave del cual nos encargaremos esta vez.

Los 3 aliados de una piel radiante

No es una novedad que llevar una vida saludable, hacer ejercicio y dieta es bueno para tu salud. Pero, ¿sabías que también es beneficioso para la de tu piel? Sí. Durante la menopausia es importante que lleves una dieta sana y realices ejercicio. ¿Por qué? Porque impacta positivamente en tu ánimo, tu forma de dormir, tu peso, favorece el sistema cardiovascular y ayuda a manejar la pérdida de masa ósea (muy común en esta etapa). Si tu organismo está sano… ¡tu piel también!

Pero te hablamos de 3 aliados y el tercero está asociado a la dermocosmética y se trata de que utilices productos en la piel de tu rostro que tengan activos que contribuyan a regenerar la piel madura. Un producto clave para aplicar en este momento es el Ácido Hialurónico que ayuda a recuperar la pérdida de volumen, la hidratación, combatir la opacidad y recuperar la elasticidad.